33: Like a Rolling Stone

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Para la mayoría del mundo, pensar en Pittsburgh es pensar en sus equipos deportivos, sobre todo en los Steelers, o si acaso, pensar en la industria del acero (que de ahí toma su mote el legendario equipo de la NFL), pero para los habitantes de esa zona de Pennsylvania , va mucho más que eso, sintiendo orgullo local por otras cosas más allá de los Acereros, los Piratas y los Pingüinos (equipos de la MLB y NHL respectivamente). Y una de esas cosas es la cervecería Latrobe, ubicada en el poblado del mismo nombre a unos 60 km de Pittsburgh, y su producto Rolling Rock. Y es que aunque esta cerveza ya no sea producida ahí (en 2006 Anheuser-Busch adquirió a la Latrobe Brewing Co. y desde 2008, la Rolling Rock se hace en New Jersey), los oriundos de esa zona siguen teniendo una fuerte afinidad por esta cerveza clara de botella verde.

rollingrock_TBD_2La Rolling Rock nació en 1939 y poco a poco fue pasando de ser un producto local para convertirse en una marca nacional en Estados Unidos, esto sobre todo en la década de los 90’s cuando esta cerveza se popularizó, en gran medida por la simpatía que algunos artistas mostraron en torno a la imagen “indie” de esta cerveza, y su leyenda urbana en torno al misterioso número ’33’ que viene impreso en la botella; algunos dicen que ese número está ahí por accidente de impresión, otros afirman que es debido a que 1933 fue el fin de la prohibición, otros tantos están convencidos que es debido al año de fundación de los Steelers mientras que algunos de los que han trabajado en esa cervecería se refieren a este ‘33′ como el número de palabras que contiene el manifiesto de calidad, escrito por los fundadores de esta cervecería, sea cual sea el origen, el ’33’ sigue ahí hasta la fecha, acompañando a la imagen del caballo blanco.

rollingrock_TBD_4Sin embargo, conforme los noventas fueron pasando -y de paso, la cervecería Latrobe de dueños-, la Rolling Rock fue dejando de tener presencia en la cultura estadounidense de consumo, y por lo tanto dejó de verse en los anaqueles de muchas tiendas.  Pero como todo en esta vida son ciclos y las piedras siguen girando, en tiempos recientes la Rolling Rock ha comenzado a tener un resurgimiento, impulsado por sus actuales dueños (AB-Inveb) volviendo a verse en muchos lados de Estados Unidos e incluso en México, donde ya se encuentra en tiendas especializadas como Lúpulo.

rollingrock_TBD_1Esta Rolling Rock (4.6% ABV) es una  lager ligerita, muy clara y con poco nivel de amargor, muy al estilo de las clásicas cervezas lager americanas; según dicen los que la probaron previo a que Anheuser-Busch adquiriera la marca, la Rolling Rock presentaba más complejidad que ahora. Y es que aunque esta cerveza no es mala -comparándola con otras lagers comerciales americanas-si es una de esas cervezas que muchos califican como “cervezco”, ya que debido a su ligereza en cuerpo y amargor, resulta buena para tomarla como una bebida refrescante y no como “cerveza de sesión”. Vaya, resultaría injusto comparar a esta Rolling Rock con cervezas de otra categoría, cosa que como ustedes saben, estos días hace mucho pretensioso por ahí. Dicho esto, la Rolling Rock es una muy buena opción -contra otras adjuntas- para refrescarse una tarde calurosa, o bien para desestresarse después de una jornada dura de trabajo y contra eso ¿cómo decir que no? ¿no?

Cheers!
The Beer Daily Dudes

fotografías ©Carlos Leal Jiménez

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$36,000 dólares por una lata de cerveza. (Hielera no incluida).

Estas tres latas valen $93,600 dólares. Que bueno que no encontraron el six pack completo.

Este mundo está cada vez más loco, mientras por un lado la crisis económica sigue haciendo de las suyas en muchos países, en otros lugares la gente paga altísimas cantidades de billetes por hacerse de un objeto de colección, ya sea antiguas tarjetas de béisbol con los rostros de Babe Ruth o Jackie Robinson, monedas de hace algunos siglos, obras de arte de grandes maestros como Picasso, Dalí o Van Gogh, vestuarios de legendarias estrellas de Hollywood o latas de cerveza…esperen un momento, ¿dijimos latas de cerveza?

Sí, aunque pudiera sonar extraño, hay estrafalarios coleccionistas que pagan miles de dólares por hacerse de latas, botellas, corcholatas y otro tipo de memorabilia cervecera, como fue el caso hace pocos días en el estado de Pennsylvania, en al casa de Subastas “Morphy Auctions”, donde se subastaron 10 antiguas latas de cerveza en buen estado, con un precio de puja inicial de $10,000 USD por cada una. Algunos de estos viejos empaques por lo que pagaron más,  fueron la lata de la Apache Export Beer LP, cuyo precio final fue de $28,800 USD, cantidad similar por la que también se vendió la lata de la cerveza National Bohemian Bock. 

Pero la que se llevó las palmas fue la lata de la Gibbons Bock LP, cerveza estilo Bock producida hace ya algunos ayeres; por este artículo, el ganador de la subasta desembolsó  la sensible cantidad de $36,000 USD. Si la cantidad no les hace click, para que se den una idea de que tan rentable fue para el dueño de estas latas mantenerlas en buen estado y mandarlas a la subasta, el día de hoy el precio de la libra de oro, es de $28,160 USD, o sea que si tienes en tu poder una libra del metal áureo, tendrías que pedir prestado por ahí para poder pagar por esa lata de Gibbons Bock, por eso les decimos que el mundo está medio de cabeza estos días.
Ojalá y algún día nuestra colección de botellas y latas de cervezas mexicanas desparecidas la podamos mandar a esas subastas, así podríamos mantener vivo por muchos años a TheBeerDaily.com, ¿no?

¡Salud!
TBD Staff