Vaya historia…

Gracias.

No en un día como hoy, hace más de 10,000 likes, estábamos platicando mi amigo Chuck, el Ñi y yo sobre cervezas, en los tiempos cuando en mi hogar (que es el de ustedes también) solíamos tener los Miércoles de Mac, una ceremonia legendaria en la casa St. Pauli, donde vivimos.

En esos tiempos, un servidor y estos apuestos caballeros, solíamos probar distintas cervezas, marcas, tipos, colores, tamaños y platicábamos al respecto de manera cotidiana, ya teniendo una de idea de lo que se trataban algunos componentes o en qué consistía una IPA, una Porter, porqué la Guinness tenía tanta espuma, etc. Por mi parte, de repente les tomaba una foto y las subía a mi Face a la carpetita llamada Bier! A algunos les interesaba, a otros no, pero yo quería llevar una especie de bitácora pues nunca subo nada interesante a mi perfil…

En una de las tantas pláticas con mis amigos Chuck y Ñi, se nos ocurrió abrir un blog de hobbie, un blog de cheve ‘para subir fotos de chelitas y cosas así’, pensamos que ‘estaría chido, ¿No?‘; después también se nos ocurrió abrir un fanpage en la cual empezamos con 3 likes, de nosotros mismos… después 5de nuestros cuates, 10 y nos sorprendimos bastante cuando eran 100. Empezamos con unos artículos cortos sobre el tema, como el de la San Miguel que escribió Chuck y el de la Wychwood Brewery, escrito por mi. También teníamos unas infografías y cosas así leves, honestamente no sabíamos la que nos esperaba… de pronto, los likes fueron incrementando gracias a ustedes, nuestros queridos seguidores y llegamos a 1,000; que ya era demasiado para nosotros, y así fue el orden creciente hasta superar los 10,000 ahora, ciertamente llenaríamos el Auditorio Nacional, en la Ciudad de México, y nos quedaríamos más de quinientos afuera.

Este artículo es para agradecer a todos ustedes por leer lo que escribimos, por enviarnos sus fotos para el Beer Team, inaugurado por mi primo, el buen Molo. También queremos darles las gracias por siempre estar al pendiente de lo que hacemos y por ayudarnos a meternos más en una onda tan interesante como es la chela. Hemos aprendido muchas cosas, conocido a mucha gente y vivido muchas experiencias también.

Tal vez no sea gracias a nosotros que ustedes estén probando nuevas chelitas pero, en lo personal, me gusta saber que por lo menos a 1,000 de ustedes les gusta la Minerva Stout Imperial o que les gustaría llevar dentro del lonche al trabajo, una London Pride tanto como a mi, estaría genial, ¿No?.

De verdad, muchas gracias a todos ustedes, esperemos sean nuestros seguidores durante mucho tiempo más en este sueño llamado The Beer Daily y nos sigan apoyando y orientando, continúen leyéndonos, escribiéndonos y aguantando el spam que les aparece en su timeline día a día (jojojo).

¡10,000 y pico de ‘saludes’, por todos ustedes!

Muchas gracias.

 – Herr Playmo von Freuschland

@capitanudillos

PS. La neta aún no me cae el 20 de todas las personas que están con nosotros, (Si usted está leyendo esto ahora, sonría, pues es una de ellas); se que es una cifra importante y no dejo de sorprenderme.

Cerveza que se sube a la cabeza, literal.

El Beer Shampoo de la marca Mr. Look, con extractos de cebada y lúpulo

En esta ocasión no les hablaremos de una cerveza en particular, o de un buen lugar para disfrutar de ésta, sino mas bien de un shampoo, sí, de un producto de higiene personal.
¿Y qué tiene que ver un jabón líquido para el cabello con este blog dedicado a la cerveza? Pues es que este shampoo tiene la particularidad que fue diseñado emulando a una botella de cerveza, eso sí, no del todo bien, porque aunque su etiqueta toma elementos clásicos de un emblema cervecero, acá sus diseñadores hicieron una mezcla media rara de elementos, algunos con estilos más adecuados a un aceite de motor que a una cheve, pero en fin.

Este shampoo para hombres marca Mr. Look, cuya fórmula está diseñada para ayudar a evitar la caspa y caída del cabello, tiene extractos de cebada y de lúpulo en su mezcla, los cuales como ustedes saben, son ingredientes cerveceros. Así podemos decir que el Beer Shampoo no sólo fue creado en base a pura imagen cervecera, lo cual es bueno después de todo.

Las dos presentaciones  del Beer Shampoo, con cambio sólo en su color de etiqueta

En algunas partes del mundo, hay gente que usa la cerveza como acondicionador para el cabello, según esto porque los contenidos de vitamina B en esta sabrosa bebida, ayuda a tener un cabello más resistente. Además, se dice que el lúpulo y la cebada contribuyen a reparar el cabello dañado y darle un brillo más natural. De hecho, La actriz Catherine Zeta-Jones está entre las celebridades de Hollywood que han hecho público su gusto por el lavado de cabello con cerveza varias veces al mes. ¿Será?

Este Beer Shampoo viene en dos presentaciones: “Clara” y “Light”, pero según lo que se aprecia en los ingredientes, lo único que cambia en estas dos variantes es el diseño de la etiqueta, una es dorada simulando una cerveza, mientras que la otra es ¡morada!. Sí, extraña decisión de diseño, eso de poner el líquido de tonos morados en su versión “light”.
El shampoo se vende en México en cadenas comerciales como Wal Mart y en su etiqueta hace enfasis en un detalle “no ingerir”, suponemos que habrá gente despistada que de pronto le quiera dar un trago a este shampoo, que por cierto no huele para nada a cerveza.  Esperemos que nadie lo use para prepararse una Michelada, le sabría bastante rara.

¡Salud!
TBD Staff

La polémica cerveza olímpica de Brew Dog: Esteroides incluidos

La imagen promocional oficial de esta cerveza “olímpica” de Brew Dog

Hoy inician oficialmente los juegos olímpicos de Londres, y por ello hay mucha actividad en esa ciudad y en todo el Reino Unido, y las cerveceras no quisieron quedarse atrás ante este evento mundial.

Un ejemplo de ello es el lanzamiento de la cerveza “Never mind the anabolics” de la Brew Dog, el cual como ustedes se imaginan viendo su nombre (haciendo alusión al disco clásico de los Sex Pistols), viene cargado de polémica. ¿La razón? Esta cerveza IPA de 6.5% ABV viene “sazonada” con sustancias prohibidas por el Comité Olímpico Internacional, tales como guaraná, ginko, creatina, nuez de cola…y esteroides, sí, esos esteroides que han despojado de medallas a muchos atletas. Aunque directivos de esta cervecera escocesa han declarado que sólo en el primer batch de esta cerveza se le incluyeron esteroides, el resto de la producción de la “Never mind the anabolics” sí contendrá el resto de las sustancias que el COI y las federaciones deportivas prohiben a los atletas consumir.

Con imágenes de fondo de atletas olímpicos que han sido descalificados por dopaje, esta otra foto oficial de Brew Dog

Y aunque pudiera parecer que el lanzamiento de esta Brew Dog es una decisión no del todo limpia, la realidad es que la creación y mercadeo de esta cerveza es una crítica abierta al exceso de la comercialización del espíritu olímpico, esto publicado su sitio web:
“No creemos que esta cerveza sea tan absurda e hipócrita como los patrocinios de las cadenas de comida rápida y macrocervecerías que ahora parecen manipular los juegos de la gente. Ya es hora de que  el evento deportivo más grande del planeta no esté patrocinado por una marca de restaurantes de comida rápida, un fabricante de refrescos o cervecerías monolíticas trans-nacionales. Consumir una hamburguesa grasosa, una bebida llena de azúcar o una lager producida de manera industrial ciertamente no es la mejor manera de preparar a un humano para competir en el steeplechase”.

Y para seguir con la crítica, la cervecera indica que parte de las ganancias de esta cerveza irán a una “buena” causa: patrocinar la nueva tabla de surf de un perro surfista llamado Abby, “aún así, no podemos ser más absurdos que el excesivo comercialismo olímpico” cita la cervecera escocesa.

BrewDog no es ajena a la polémica, ya que en el pasado han lanzado productos con nombres que han sido considerado ofensivos para muchos, como Dead Pony Club y 5 A.M. Saint.  Habrá que ver cómo le va en ventas a esta cerveza, pero considerando el ácido humor del británico, creemos que les irá bien con el lanzamiento de esta cerveza, que estará disponible en el Reino Unido en barril y en botella, esta última vía su sitio web.

¿Ustedes qué opinan de esta postura crítica a los sponsors del movimiento olímpico?

Cheers!
TBD Staff

Miller Chill: bajas calorías con sabor cítrico.

“Chill”, la cerveza baja en calorías con sabor a Lima, de Miller.

Siguiendo con el tema de las cervezas estadounidenses bajas en calorías, ahora nos tocó probar uno de los más recientes lanzamientos en esta categoría en el país de las barras y las estrellas, se trata de la Miller Chill, cerveza ligerita saborizada, en este caso a Lima (o lo que viene siendo limón para los estándares mexicanos).

De envase claro, esta cerveza le compite frontalmente a la Bud Light Lime

Esta cerveza fue creada por la compañía de Milwaukee en el 2007 bajo la marca Miller Chelada, y en ese año fue uno de los lanzamientos cerveceros más exitosos en Estados Unidos. Sin embargo, para el 2008 las ventas de esta Miller Chelada sufrieron una buena caída, debido en gran parte al lanzamiento de la Bud Light Lime. Esto llevó a MillerCoors a  darle una renovada a su estrategia para este producto, relanzándola bajo la marca Miller Chill, la cual incluyó un cambio de imagen, siendo el más notorio, su cambio de botella verde a una transparente, con lo cual la marca buscó posicionarla como una cerveza más refrescante que su competencia, muy al estilo de algunas mexicanas como Corona, Sol y Mexicali. De hecho, el diseño gráfico de esta marca toma elementos de diseño basados en estilos prehispánicos mexicanos, siendo esto evidente en sus corcholatas.

La imagen de la Miller Chill usa elementos gráficos estilo mexicano

La cerveza es pasable, considerando que es una cerveza baja en calorías -y esto lo comento antes de que los amantes de las cervezas “rudas” se nos echen encima-, aunque esperábamos notar un poco más sólido el sabor a lima, esto quizás por la percepción que tenemos de una “chelada”. En cambio el sabor de la Miller Chill es en cierta manera medio dulce, sin llegar a ser una Shandy, pero ciertamente no es una “chelada style beer”. Con un 4.2% de ABV, y de cuerpo bastante ligero, esta bebida de Miller es buena como para “cambiar la esprea” en estas tardes de verano, sobre todo si estás haciendo una parrillada, pero la verdad, no está como para tomarse más de un par, y no porque sea un mal producto, sino simplemente porque su sabor te llega a empalagar, lo cual sucede no solo con esta Miller Chill, sino con casi todas las cervezas saborizadas, incluso las mexicanas como Sol Limón o Sol Clamato.

Independientemente de su sabor o textura, lo que si nos gustó bastante es la imagen de esta cerveza, su buen balance de color entre los verdes de su logotipo con el amarillo del líquido en su botella, avisa claramente que es una bebida refrescante con un twist mexicano/latino.
En fin, ven por ahí a esta Miller Chill y tienen gana de romperle un poco la rutina cervecera a sus papilas gustativas, pruébenla, y díganos que les pareció este esfuerzo de la cervecera de Milwaukee en el segmento de las cervezas saborizadas.

Cheers!
>>>Chuck

fotos ©Carlos Leal Jiménez

Sköl!, ¿vamos por un Six Pack o una cubeta?

Desde cráneos que se convirtieron en maneras para brindar hasta el origen de los six packs, les presentamos otra infografía de TheBeerDaily.com, ¡que lo disfruten!

Cheers!
TBD Staff

diseño de infografía por el Señor Smith

 

Historia cervecera mexicana: Listón Azul

La extinta Listón Azul, cerveza en lata que se producía en Chihuahua hace muchos años.

Hace tiempo habíamos hablado en TheBeerDaily.com  de Cruz Blanca, una marca de cerveza mexicana ya extinta que se fabricaba en el estado Chihuahua; ahora les traemos unas imágenes de otro de los productos de esta cervecera Chihuahuense que se produjo y comercializó bastante hasta mediados de la década de los ochenta, se trata de la cerveza “Listón Azul”.

Esta cerveza que se producía primordialmente en Ciudad Juárez -aunque también llegó a hacerse en ciertas épocas en la capital de Chihuahua- tenía la particularidad de ser comercializada sólo en lata, esto le permitía a  la Compañía Cervecera de Chihuahua competirle frontalmente a la marca Tecate, de Cervecería Cuauhtémoc.
Lo curioso del caso de esta marca, es que en un inicio la cerveza de lata de la cervecera Chihuahuense se mercadeaba bajo el emblema de su producto estrella que era Cruz Blanca, sólo que para diferenciarla de la tradicional cerveza en botella, a la lata le hicieron un diseño especial, bautizándola como Cruz Blanca Listón Azul.

Una imagen sencilla que emulaba al listón azul, símbolo universal del premio a la calidad.

¿Porqué “Listón Azul” ? la idea era simple, el símbolo de premio a la calidad superior  a nivel mundial ha sido desde hace muchos años un listón azul,(algunas cervezas en otras partes del mundo llevan el mismo nombre como la Pabst Blue Ribbon o la Peroni Nastro Azzurro), y al ser esta cerveza mercadeada en lata, su precio era más elevado que las típicas botellas retornables de 325 ml. de la época, de ahí que los mercadólogos de ese entonces buscaran implantarle un valor percibido superior, a un líquido de calidad similar a la Cruz Blanca. Con el paso del tiempo, y como le ha pasado a muchos productos, la gente dejó de pedir “una Cruz Blanca, Listón Azul” para acortar el nombre a simplemente “Listón Azul”; su diseño en blanco y azul es sencillo, destacando la silueta de una medalla con su listón azul, en la que se aprecia claramente su nombre.

Esta cerveza Listón Azul era la típica Pilsner mexicana, que en su lata indica que tenía menos de 6 grados de contenido alcohólico, marcados en grados Gay-Lussac, ya que en aquella época, esa métrica creada por el científico francés Joseph Louis Gay-Lussac era el estándar en la industria; la Listón Azul tenía presencia nacional, aunque era más marcada su distribución en los estados del norte del país. Su lata, como muchas de su época (si no es que todas) era de hojalata, consistente en tres piezas (hoy en día son de dos o incluso una) la cual era soldada con puntos de chispa, su tapa no es como las conocemos ahora, sino que era desprendible totalmente; podemos decir que en su confección, esta lata si era bastante ruda, vaya podrías descalabrar a alguien aventándole una de estas cervezas.

Una lata de tres piezas soldadas; así eran los empaques de Listón Azul de esa época.

Aunque esta lata de Listón Azul que tenemos en nuestra colección data por ahí de 1976/1977 -y que nunca ha sido abierta- aún se encuentra en excelentes condiciones, prácticamente sin óxido presente, y con muy pocas señales de decoloración, destacando el brillo de sus tonos azules con blanco y detalles en dorado. Se nota que en esos tiempos la calidad de los empaques sí estaba pensada para que duraran muchos años.

No tenemos el año exacto de cuando dejó de existir esta cerveza, sin embargo, todo indica que Listón Azul corrió con la misma suerte que otros productos de la Compañía Cervecera de Chihuahua, los cuales desaparecieron poco a poco de los anaqueles, al ser adquirida esta empresa por Cervecería Cuauhtémoc, para dejar de producirse en definitiva cuando esta empresa de Monterrey adquirió a la Cervecería Moctezuma en 1985, llevando a reducir su portafolio de productos.

Si alguien tiene más información sobre esta cerveza mexicana o conoce a alguien que la haya probado, contáctenos, nos dará mucho gusto tener más datos sobre este producto cervecero extinto.

¡Salud!
>>Chuck

fotos © Carlos Leal Jiménez

Polémica cervecera: la Skinny Blonde y su striptease.

La imagen de la australiana Skinny Blonde, con Daisy aún vestida.

Desde que la cerveza ha existido de manera comercial, muchas veces se ha acusado a sus productores de ser sexistas o degradar al sexo femenino, esto por el uso de imágenes publicitarias que promueven el consumo de ciertos productos a través del uso de la mujer como objeto. En años recientes, sin embargo, estas tácticas de mercadotecnia se han ido reduciendo, en parte porque en muchos países las legislaciones en torno a este tema han cambiado, o incluso, dejando a un lado cuestiones legales y más a manera autocrítica, firmas cerveceras han dejado de usar imágenes sugestivas para promover sus productos.

Una activación de Skinny Blonde, con los clones de “Daisy” a manera de Six Pack.

Sin embargo, en Australia existe una cerveza que va en contra de esta tendencia global (allá abajo muchas cosas son bastante diferentes al resto del mundo), se trata de la Skinny Blonde, cerveza producida por la microcervecería “Brothers Ink”, fundada en 2006 por el baterista de la banda The Vines Hamish Rosser, el artista plástico Jarod Taylor y el vitivinicultor Richie Harkham.

Quienes han probado esta cerveza, no hablan ni bien ni mal de ella, (es una cerveza baja en carbohidratos de 5.2% ABV), sin embargo, la marca ha dado mucho de que hablar en varios círculos, no sólo en Australia, y no precisamente por su sabor, sino por la polémica generada por las etiquetas de sus botellas, donde predomina la ilustración de una hermosa mujer en un bikini rojo, muy al estilo de las imágenes Pin Up de los años 40’s, esta modelo es conocida como “Daisy” .

Con el cambio de temperatura de la botella, la etiqueta cambia, digamos que bastante.

Utilizando la tecnología química conocida como Termocromismo, la cual permite “pintar” ciertos papeles de acuerdo a la temperatura del mismo (Coors Light usa la misma tecnología para sus botellas en USA, México y otros países, sólo que en las montañas de su etiqueta), la rubia del bikini rojo se “quita” su traje de baño, dejando muy poco a la imaginación del consumidor de esta cerveza.  Esto es, cuando la botella está llena y bien helada, la tinta roja conocida como un leuco pigmento), con la que está impresa la parte del bikini, se activa, al estar en contacto con la superficie fría de la botella (un asunto químico de transferencia de temperatura), pero a medida que la botella va vaciándose y por ende el vidrio calentándose, el proceso químico del leuco pigmento hace que la tinta se torne invisible, dejando al descubierto los atributos de la rubia, dejándola desnuda a los ojos del cervecero y acompañantes.

Esta situación generó mucho ruido mediático en la tierra de los canguros cuando la cerveza fue lanzada, ya que organizaciones de defensa a los derechos de la mujer intentaron boicotear su venta, lo cual le dio a este producto bastante exposiciones en los medios de ese país. Sus productores se defendieron alegando que además de que no violaban ninguna ley (de las de allá, claro está) los australianos han crecido rodeado de la cultura topless en sus playas, por lo tanto no veían la diferencia entre una bañista en Sydney o una botella de cerveza, la cual la definen como “un poco de humor en el serio negocio cervecero Australiano”. Finalmente, las protestas no hicieron que la cerveza fuera vetada y hasta donde sabemos la Skinny Blonde sigue a la venta en algunas de las ciudades de ese país.

En fin, con censura o no, esta cerveza seguro se vendería en muchos países del planeta, y no tanto por la calidad de ésta, ¿no creen?.
Habrá que buscar unas de estas Skinny Blonde.

Cheers!
TBD Staff

Sabor de clase mundial: La Chouffe Blonde

Una delicia desde Bélgica: “La Chouffe Blonde”

Aunque para muchos de nuestros lectores no es un dato desconocido, Bélgica es el país más prolífico en términos cerveceros. Con más de 400 diferentes marcas de cerveza, este pequeño país europeo es reconocido también por la calidad de sus bebidas a base de mata y lúpulo, donde además de producir millones de hectolitros de fórmulas bastante conocidas, tienen el carácter creativo para experimentar con muchos ingredientes y procesos, creando en mucho de los casos cervezas de una calidad soberbia.

Algunas de esas cervezas con calidad y sabor de calidad mundial son producidas por la  ‘Brasserie d’ Achouffe’ (Cervecería de Achouffe), cervecería ubicada en la región boscosa de los Ardennes Belgas, que desde su fundación en 1982 (bastante joven considerando la  tradición cervecera de este país) ha creado productos cerveceros que, además de ganar medallas en múltiples festivales, se ha ganado el respeto de los críticos y consumidores no sólo en Europa sino en todo el mundo. Las cervezas de esta casa son fácilmente identificables por la imagen de divertidos gnomos que decoran sus etiquetas y corcholatas, muy al estilo de los mitos de los bosques de esa región europea (los conocidísimos Pitufos nacieron en Bélgica, por ejemplo).

La Chouffe Blonde y sus característicos gnomos belgas en esta botella de 330 ml.

Esta ocasión tuvimos la fortuna de deleitarnos probando uno de sus productos estrella, nos referimos a la ‘La Chouffe Blonde’, una Ale rubia sin filtrar que conseguimos en su presentación de 330 ml (también se ofrece en presentación de botellas de 750ml y de 1.5 l, además de barril, esta última en algunos países europeos). La Chouffe Blonde es una cerveza con un buen contenido alcohólico (8% ABV), que se siente claramente al dar el primer trago, aunque siendo sincero, ya los subsecuentes no los sientes tan duro (increíble como en algunas ocasiones el paladar se adapta tan rápido, ¿no?). Al servirla en un vaso simple (no teníamos un cáliz, como dictan os cánones, shame on us!) puedes apreciar un intenso color naranja/cobrizo, opaco, muy del estilo de estas cervezas, incluso con bastantes residuos, ya que como mencionamos, esta es una cerveza sin filtrar. El nivel de espuma de esta ale belga es excelente, en nuestro caso se formó una nata bastante sólida que duró bastante en el vaso, tanto así que incluso bromeando decíamos que podríamos hacer una escultura ‘espumosa’ mientras hacíamos la prueba.

Excelente el nivel de espuma de esta La Chouffe Blonde, prácticamente una nata.

Su aroma es complejo, pero simplemente delicioso, ya que despide múltiples matices entre los que destacan los afrutados (manzanas, peras) mezclados con los de especias y hierbas (clavo, cilantro) y por supuesto el kick del aroma fermentado.  En cuestión de sabor, esta “rubia” belga es fiel a los aromas que captas de inicio, buenos tonos de frutas como las que mencionamos, (más una pequeña parte cítrica que aparece por ahí) con especias le dan a esta cerveza un buen balance con su contenido alcohólico, que si nos preguntan, sí, si se nota bastante, sobre todo en la primer pasada. De entrada esta cerveza te puede saber un poco amarga, pero la verdad es que ya en el segundo trago esto se te pasa, y comienzas a apreciar la complejidad de su mezcla, la cual va bastante bien con su cuerpo medio y alto nivel de carbonatación.

A nivel general, esta cerveza es de lo mejor que hemos probado este año, podemos decir que esta ‘La Chouffe Blonde’ es una auténtica joya que todo aquel que sea fanático de las buenas cervezas no debe dejar de probar y compartir…y por supuesto, volver a probar.
Si la ven por ahí, inviertan unos pocos pesos extra y cómprense varias, estas ‘La Chouffe Blonde’ merecen estar por ahí en sus gavetas, esperando ser degustadas en ocasiones especiales.

Op uw gezondheid!
>>Chuck 

 fotos ©Carlos Leal Jiménez

¡Muy pronto, más Beer Shirts!

¡Ya en producción, más Beer Shirts de The Beer Daily!

Ya están en proceso de producción con Sr. Jalapeño el nuevo batch de Beer Shirts, las cuales muy pronto estarán a la venta en varias tiendas especializadas de cervezas, en Monterrey y otras ciudades de México….¡espérenlas!

Y  si vives en USA, acá puedes comprar tu Beer Shirt.

Cheers!
TBD Staff 

 

Red Leaf Project: Molson Canadian y su iniciativa ecológica

Molson Canadian ha lanzado el ecológico “Red Leaf Project” en su tierra: Canadá

Molson, una de las principales marcas de cerveza en Canadá ha echado a andar el “Red Leaf Project” (en alusión a la roja hoja de Maple, símbolo de Canadá y también de esta cerveza), el cual consiste en unir esfuerzos entre empleados de esta firma cervecera, comunidad y organizaciones sin fines de lucro, para “crear un Canadá aún más limpio y verde”.

Una de las muchas brigadas del “Red Leaf Project” auspiciado por Molson Canadian

Dentro de las actividades de este ecológico proyecto se incluyen brigadas de recolección de basura en bosques, parques públicos, lagos, ríos y playas de este país, apoyo económico y logístico a organizaciones que trabajan en pro del medio ambiente como el Worldwide Wildlife Fund y Canada Tree. Con esta organización, Molson Canadian está plantando 100,000 árboles en áreas que han sufrido deforestación en años recientes.  Además de estos esfuerzos, la marca lanzó una campaña publicitaria buscando involucrar  a más gente en este proyecto, ligándola con eventos deportivos y musicales, como conciertos en varias ciudades de las provincias canadienses.

Una ingeniosa idea promocional y ecológica: los coasters de Molson Canadian

Una de las acciones más interesantes de este proyecto, es el lanzamiento de “coasters” o portabebidas hechas de material reciclado, que además tienen semillas en éstos. Así, una vez que la gente use estos portabebidas y se humedezcan con el “sudor” de la cerveza, pueden ser plantados, y así contribuir con el proceso verde. Estos portabebidas están siendo distribuidos en los empaques de esta cerveza en todas las provincias de Canadá, desde Nova Scotia hasta British Columbia.

Ojalá que en el mundo haya más iniciativas como esta que están llevando a cabo en las bellas tierras canadienses, y así podamos brindar por una planeta más verde, demostrando que la cerveza es mucho más que latas, tarros y botellas.

Cheers!
TBD Staff