
Aunque suene a discurso barato y trillado, la guerra nunca deja nada bueno, si no, pregúntenle a Rusia y sus líderes, esto por su decisión de invadir a Ucrania el año pasado, con todo el dolor y sufrimiento que ello ha generado a ambos lados de este conflicto y en el cual a los rusos nos les ha ido como ellos habían pensado. Pues bien, además de lo anteriormente mencionado, este país gobernado por Vladimir Putin ha tenido que enfrentar una serie de consecuencias de carácter económico, con muchas compañías retirándose del país, ya sea por presión o bien por no convenir a sus intereses de negocio (McDonald’s cerró el año pasado sus cientos de restaurantes en Rusia, por ejemplo).
Ahora fue el turno de Heineken , quien por fin completó su salida del mercado ruso, que había anunciado y comenzado en el 2022, vendiendo su operación a una empresa rusa, cuyo giro es la manufactura de latas de aerosol, cosméticos y artículos para el hogar. Sí, leyeron bien, a eso se dedican los compradores de las plantas y redes de distribución que hasta ahora pertenecían a la cervecera holandesa; esta empresa rusa se llama Arnest Group, por si estaban con el pendiente.
Después de un largo proceso de meses, esta transacción ha recibido todas las aprobaciones requeridas por el consejo de administración de la cervecera holandesa y concluye el proceso que inició en marzo de 2022 para salir de Rusia, sellando oficialmente la venta a Arnest por la gran cantidad de ¡un euro!, incurriendo en una pérdida acumulada total esperada de 300 millones de euros, según datos oficiales del mismo Heineken. Ouch!












Apenas ayer 

Como cada cuatro años, la copa mundial de fútbol llega, esta ocasión por vez primera a un país de medio oriente, siendo Qatar la sede de este 2022. No es un secreto que el que esta edición del mundial está lleno de situaciones particularmente inusuales (por no decir, turbias) que van desde la polémica elección de la sede, moviendo la fecha de su celebración a un inusual invierno boreal, en un país que no tiene una cultura futbolera, que construyó estadios e infraestructura con mano de obra de inmigrantes que según reportes, trabajaron en condiciones inhumanas cercanas a la esclavitud, hablando de que incluso fallecieron miles de estos trabajadores (cosas que las autoridades cataríes no han aclarado). Además, por “cuestiones culturales”, hay un estricta observación de reglas que, según algunos grupos observadores de derechos humanos, viola la precisamente estos, al prohibir celebraciones ruidosas, muestras de cariño en público y por supuesto, el consumo de alcohol, ya que en este emirato, esto está proscrito por ley, para los ciudadanos de este emirato.
Pues así tan rápido volvió a llegar la fecha cervecera más spooky del año, hablamos del día de Halloween o Hallowbeer como lo festejamos todos por acá en TheBeerDaily.com
No es secreto que la categoría cervecera ha sufrido una acelerada metamorfosis los últimos años, fragmentándose cada vez más, esto a la vez como causa y como efecto, obligando a los productores de cerveza a buscar soluciones para no dejar ir a consumidores cautivos. Así, hemos sido testigos esta última década de la desaparición de marcas, la mutación de otras tantas en productos que cada vez menos parecen cerveza (ahí les hablan, Sol y Victoria) o el incansable lanzamiento de cervezas muy aguadas y ligeras, dirigidas a un segmento que, siendo honestos, no le gusta mucho el sabor a cerveza.
Sin embargo, no todo son malas noticias para los productores de cerveza del país de las barras y estrellas; las ventas de este producto (en el tipo de cerveza “industrial”) crecieron un 1% contra año anterior, mientras que la cerveza artesanal tuvo un crecimiento del 8%. ¿Contradictorio? No tanto. El asunto es que el mercado de bebidas alcohólicas está creciendo mucho y la cerveza ya no está captando una gran parte de ese crecimiento.